Pocas cosas son tan importantes para la industria del petróleo y el gas como las infraestructuras. Cualquier cosa que amenace el rendimiento y la vida útil de tuberías, tanques de almacenamiento y otras piezas cruciales del equipo debe tomarse lo más en serio posible. Por eso no se puede exagerar la importancia de la vigilancia de la corrosión, ya que proporciona a las empresas de petróleo y gas los medios para detectar señales de problemas y rectificarlos antes de que afecten a la producción. Sigue leyendo para saber más sobre la importancia de la vigilancia de la corrosión en la industria y cómo puede conseguirse.
¿Qué es la corrosión?
La corrosión es el término que designa la descomposición de los metales mediante una reacción química o electroquímica. Aunque el óxido es la forma más común y evidente de corrosión, no es la única. Hay otras que pueden no ser tan perceptibles a simple vista, como la picadura. Esto ocurre cuando las picaduras microscópicas de la superficie del metal se llenan de altas concentraciones de materiales corrosivos. La corrosión galvánica se produce cuando dos materiales diferentes se sumergen en agua y entran en contacto eléctrico entre sí, haciendo que pasen electrones de uno a otro.
Independientemente de la forma que adopte, la corrosión tiene como efecto último el debilitamiento de los metales. Esto puede provocar fallos en los equipos, así como la formación de agujeros en las tuberías de proceso. Tratar con agua y otros materiales potencialmente corrosivos significa que la industria del petróleo y el gas en particular debe ser consciente de la amenaza potencial.
Por qué la vigilancia de la corrosión es crucial en la industria del petróleo y el gas
Disponer de una estrategia para gestionar la corrosión y su control es importante por varias razones, entre ellas:
- Integridad y longevidad de los activos: Estar atento a los signos de corrosión ayuda a conservar la maquinaria y las tuberías el mayor tiempo posible. Cuando los operadores pueden detectar la corrosión en sus primeras fases, pueden tomar medidas para resolverla y proteger sus activos.
- Garantía de seguridad: Cuando las tuberías y las máquinas se averían debido a la corrosión, pueden producirse fugas y vertidos que ponen en peligro a los trabajadores. La detección precoz facilita su prevención.
- Protección del medio ambiente: Las fugas y los vertidos también se cobran un peaje medioambiental. Esto hace que la vigilancia de la corrosión también sea importante desde una perspectiva ecológica.
- Ahorro de costes: Las averías derivadas de los efectos de la corrosión suelen ser costosas de reparar y resolver. Estar atento a las primeras señales de advertencia puede ahorrar mucho a los operadores a largo plazo.
- Cumplimiento de la normativa: Los reglamentos y las normas del sector, como la API 570, exigen que el sector disponga de una estrategia de supervisión. Esto es crucial para evitar sanciones legales y económicas.
Diferencia entre vigilancia de la corrosión e inspección de la corrosión
Aunque en general puede decirse que cumplen el mismo propósito, hay algunas diferencias clave entre la vigilancia de la corrosión y la inspección de la corrosión. Monitorizar significa recoger y analizar constantemente datos para medir el índice de corrosión. Suele implicar el uso de sensores o sondas colocados sobre o dentro de los bienes, conectados a un sistema central que mide la pérdida de metal, las condiciones ambientales y otras variables.
Por otro lado, la inspección es una tarea periódica que normalmente se utiliza para observar el alcance de cualquier corrosión. Este proceso implica inspecciones visuales, así como trabajos de laboratorio y diversas formas de pruebas no destructivas. Estos elementos se programan y no proporcionan una visión continua del ritmo de la corrosión del modo en que lo hace una supervisión constante. Ambos tienen su propósito y su lugar en la industria del petróleo y el gas, pero no deben considerarse intercambiables.
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